Hacia la Ruta de las Especias: Cristóbal Colón I

Si el lector del blog a seguido esta serie de capítulos en el orden que vienen expuestos, habrá podido comprobar que, hasta la fecha, nos hemos centrado en analizar los precedentes a la expedición de Fernando de Magallanes y su Primera Circunnavegación de la Tierra. Estos precedentes bien pueden no ser de interés para parte de vosotros, pero, desde LWDC, consideramos imprescindible trazar una "hoja de ruta" para que, cuando lleguemos al episodio de Magallanes (que...¡tranquilos!; llegará pronto) podamos comprender que nada en la Historia ocurre "porque sí" y que existen unos precedentes que ayudan y mucho a explicar ese "desarrollo acumulativo"en el que la hegemonía y el poder de una gran monarquía, unido a un potencial económico y logístico muy significativo, otorgan capacidades que la propia experiencia va incrementando y mejorando hasta hallar otras costas.....

Dicho esto, y continuando con este camino de precursores navegantes, llega el momento de reseñar los acontecimientos más interesantes del más conocido en los siete mares, el gran Cristóbal Colón, descubridor del continente americano en la fecha de 12 de octubre de 1492. Fecha que ha pasado a la Historia y es utilizada, entre otras, como final de la Edad Media  (aunque a nosotros, sin ser puntillosos, nos parece más adecuado el año 1453, pero eso es otro tema.) El caso es que la epopeya de este almirante genovés ha supuesto un hito clave en la Historia y, por ello, no podíamos pasar de largo su éxito.

Retrato de Cristóbal Colón - Ridolfo Ghirlandaio

Muchos conocen los éxitos de Colón, pero pocos saben que, antes de conseguir la financiación por parte de los Reyes Católicos, pasó por muchos intentos fracasados para conseguir todo el presupuesto necesario. Así las cosas, intentó convencer al rey de Portugal, Juan II durante muchos años. Pero la comisión del rey sabía que Colón se equivocaba en cuanto a las proporciones de la Tierra y, por tanto, Japón y China se encontraban mucho más lejos de lo que Colón proponía. Tampoco el rey estaba convencido de la misión, y más tras la firma del tratado de paz de Alcaçovas-Toledo con España, por el cual quedaban divididas las zonas de influencia atlántica, con la pertenencia de las Canarias para España. Así que, como Colón proponía un parada en las Canarias, el rey prefirió no alterar la paz lograda de ninguna forma. Finalmente, no nos olvidemos, en el anterior capítulo tratamos la hazaña de Bartolomé Díaz en 1488. La corona portuguesa ya tenía entonces una ruta más que interesante por la costa africana y, realmente no necesitaba de otra ruta.

Colón en la Corte de Fernando el Cartólico - Xilografía según un óleo de Wenzel Von Brozik. Siglo XIX

Con la corona portuguesa ya no había posibilidades, así que Colón intentó aproximarse a la Corte de los Reyes Católicos. Su confianza en sí mismo y su capacidad de persuasión convenció sobre todo a Isabel la Católica, la cual defendió la idea de llegar a las Indias por el este de Colón. Pese a las negativas de algunos miembros de la Corte, finalmente el navegante consiguió la aprobación de la monarquía española y emprendió los preparativos de su viaje.

En el siguiente capítulo trataremos los preparativos, el viaje y las consecuencias del mismo, así como lo que supuso para la navegación de Magallanes, pues este logro ratificó algunas rutas de navegación y, sobre todo, la evidencia de que la navegación trasatlántica era ya una realidad.